El Movimiento de la Nueva Era puede ser difícil de definir. ¿En qué creen sus practicantes?
¿Alguna vez has oído algo como, “Tú tienes el poder de cambiar tu propio destino”? ¿Te ha dicho alguien alguna vez, “Para encontrar la felicidad, sólo necesitas conocer tu verdadero potencial espiritual”? ¿Practicas yoga o ves a algún quiropráctico? ¿Alguna vez has usado aceites esenciales para tratar alguna enfermedad?
Puede que no lo sepas, pero todos estos conceptos y prácticas fueron popularizados por el Movimiento de la Nueva Era. De hecho, ideas y filosofías de la Nueva Era han tejido su camino en la tela cultural de muchas sociedades.
Entonces, ¿qué es exactamente el Movimiento de la Nueva Era? ¿Qué creen los practicantes de la Nueva Era, y cómo estas creencias han sido asimiladas en otras culturas?
¿Qué es el Movimiento Nueva Era?
El Movimiento de la Nueva Era (NAM, por sus siglas en inglés) no es en sí una religión. No tiene un liderazgo centralizado o una organización formal y los practicantes de la Nueva Era (a veces llamados “New Agers” en inglés) no están obligados a sostener alguna creencia particular de credo o doctrina.1
Más bien, el NAM se compone de grupos e individuos que comparten una filosofía de vida o cosmovisión similar. Generalmente centrado en la transformación espiritual personal, los practicantes de la Nueva Era se empeñan en llevar al mundo una Nueva Era de armonía e iluminación.
De hecho, el término “Nueva Era” se refiere a una era próxima de amor y luz, que los practicantes de la misma creen que vendrá a través de la transformación y la sanación a nivel individual. Según J. Gordon Melton, director del Instituto de Estudios de la Religión Americana en la Universidad de Virginia, “la Nueva Era [es] observada como la visión de una Nueva Era definida por la transformación de nuestra sociedad rota—caracterizada por la pobreza, la guerra, el racismo, etc.—a una comunidad unida llena de abundancia, paz, amor fraternal, etc.”2
La Conformación del Movimiento de la Nueva Era
Aunque el movimiento de la Nueva Era ganó más prominencia en los años 70s y 80s, sus orígenes se remontan mucho más atrás. Debido a que muchos de los conceptos de la Nueva Era están arraigados en las antiguas religiones orientales, (particularmente el hinduismo) en el gnosticismo y en el ocultismo, algunos historiadores datan del siglo segundo EC los inicios de este movimiento.3 En la historia más moderna, el NAM fue influenciado directamente por las religiones metafísicas del Nuevo Pensamiento del siglo XIX, el Espiritismo, la Teosofía y el Movimiento del Potencial Humano.4
El Movimiento del Nuevo Pensamiento, que presidió más inmediatamente al Movimiento de la Nueva Era, afirmó la creencia en la divinidad de cada individuo. Las contribuciones más importantes del Nuevo Pensamiento a la filosofía de la Nueva Era fueron la creencia de que la naturaleza fundamental del mundo es espiritual más que física, el concepto de que los “pensamientos son cosas” y la idea de que el pensamiento positivo tiene el poder de cambiar el mundo.5
Con el Espiritismo vino la noción del progreso espiritual después de la muerte y el papel de los “médiums” entrenados para ponerse en contacto con el mundo espiritual. Mientras que la mayoría de los grupos de la Nueva Era no adoptaron los métodos específicos de los médiums, si acogieron la idea subyacente. Muchos practicantes de la Nueva Era creen en poder ponerse en contacto con el mundo espiritual y recibir verdades espirituales de los no-humanos a través de una práctica llamada canalización.
Los teósofos introdujeron conceptos religiosos asiáticos como el karma y la reencarnación al pensamiento de la Nueva Era. “Específicamente, la noción de la Teosofía de una serie de vidas pasadas que progresivamente llevó a una evolución de conciencia se convirtió en la mayor parte de la cosmovisión de la Nueva Era, que prevé el desarrollo humano tal como una evolución progresiva.”6
Por último, grupos de la Nueva Era adoptaron la creencia del Movimiento del Potencial Humano de que el potencial humano ha sido limitado por la sociedad. La gente debe experimentar la sanación espiritual y el crecimiento con el fin de remediar esto, desarrollar todo su potencial y vivir vidas significativas.7
A diferencia de muchos movimientos religiosos que se extienden a través de evangelismo o el crecimiento institucional, el Movimiento de la Nueva Era se extendió principalmente a través de los medios de comunicación y la literatura de la Nueva Era. Libros de la Nueva Era y publicaciones periódicas como “El Material de Seth” (The Seth Material) de Jane Roberts y “Un Curso de Milagros” (A Course in Miracles) de Helen Schucman—ambos textos supuestamente canalizados—fueron publicadas por los principales editores como una rústica económica (TPB). En el libro de Shirley MacLaine de los años ochenta y el programa de televisión “Lo que sé de mí” (Out on a Limb) se difundieron ideas tales como la reencarnación a un público más amplio como nunca antes. Este tipo de medios de comunicación también hizo a los practicantes de la Nueva Era contemporáneos conscientes de un cuerpo más grande de personas que compartieron sus creencias.
Los estudiosos estiman que hoy podrían existir entre 20,000 y 6 millones de adherentes a la Nueva Era sólo en América.8
Creencias Comunes del Movimiento de la Nueva Era
Mientras que el Movimiento de la Nueva Era no es una religión organizada, quienes se identifican con éste a menudo mantienen una colección de creencias similares—y en algunas ocasiones eclécticas.
Los practicantes de la Nueva Era están unidos en su rechazo del monoteísmo tradicional (creencia en un Dios Todopoderoso).9 En su lugar acogen el monismo—la creencia de que todo es uno—y el panteísmo—la creencia de que Dios está en todo. De hecho, cuando se trata de Dios, estos practicantes creen que el yo es el asiento de la divinidad. Es decir, hay un aspecto de Dios dentro de cada uno de nosotros—una pequeña astilla de Dios en cada persona.
Además, todo el mundo tiene la responsabilidad de desarrollar su propio aspecto de Dios. Los grupos de la Nueva Era fomentan la evolución humana individual para aumentar la conciencia de esta naturaleza divina. Esto no se refiere a la evolución biológica, sino más bien a una evolución espiritual—una conciencia progresiva de uno mismo como divino. Esta necesidad y posibilidad de una transformación espiritual personal es una parte fundamental de la NAM.
Otras creencias frecuentemente sostenidas incluyen la idea de que el reino espiritual es responsable en gran parte de lo que vemos y experimentamos en el mundo físico, así como la noción de que el desarrollo de la propia divinidad innata conducirá a la transformación global y armonía del mundo. La creencia en la reencarnación, la capacidad de acceder al reino espiritual y las explicaciones espirituales para sufrimientos físicos también son comunes.10
Prácticas del Movimiento de la Nueva Era
Puesto que no existe alguna organización formal y la mayoría de los rituales religiosos ocurren en privado, las costumbres de la Nueva Era pueden dividirse en dos categorías: Prácticas ocultistas y prácticas humanistas.
Las prácticas ocultistas implican ponerse en contacto con el mundo espiritual y acceder a la dimensión espiritual, a menudo mediante la alteración de la conciencia. Esto incluye canalización, trabajo de cristal, lectura de las cartas del tarot, astrología y diversas formas de curación espiritual.11
Las prácticas humanistas son aquellas enfocadas en la autosuficiencia, auto superación y el desarrollo del elemento de Dios dentro de uno mismo. Algunos ejemplos son yoga, estrategias de meditación, estudio de textos de la Nueva Era, el crear un ambiente positivo y en comunión con la naturaleza.12
Muchos grupos de la Nueva Era creen en sistemas alternativos científicos y prácticas curativas naturales o espirituales. Prácticas médicas alternativas como acupuntura, ajuste quiropráctico, alimentos naturales y remedios herbales son comunes.13
El Movimiento de la Nueva Era en la Actualidad
En las últimas décadas, se han adoptado algunas ideas de la Nueva Era por la cultura dominante. Mientras que el yoga y la meditación no son prácticas exclusivamente de la Nueva Era, su popularidad y su prevalencia se correlacionan con la influencia de la Nueva Era. “Una Nueva Tierra: Un Despertar al Proposito de su Vida” (A New Earth: Awakening to Your Life’s Purpose) de Eckhart Tolle, promovido por Oprah Winfrey, se ha convertido en un best seller, y el uso de la medicina alternativa ha aumentado dramáticamente en las últimas décadas.14
Todo esto parece indicar que, aunque el despliegue publicitario del Movimiento de la Nueva Era pudo haber caído a través los años, algunas ideas y prácticas de la Nueva Era están aquí para quedarse.