Hay una gran cantidad de científicos y filósofos muy populares; están Richard Dawkins, Sam Harris, otros que han escrito muy audaz y fuertemente que la ciencia esencialmente no sólo ha refutado a Dios, sino que lo ha hecho irrelevante. Dicen que hubo siglos de la historia humana, donde talvez Dios y la religión eran necesarios para ayudar a explicar las cosas inexplicables que todos enfrentamos en la vida humana, pero ahora que tenemos ciencia, ahora que la ciencia, básicamente, ha demostrado la forma en la que las cosas existen, ya no necesitamos una idea de Dios. Siempre siento que es un poco divertido. Me recuerda lo que pasó en 1961 cuando los rusos enviaron al primer cosmonauta al espacio y fue un momento muy emocionante para todo el mundo. El primer humano en el espacio. Y cuando llegó al espacio, el mensaje que envió a la Tierra fue: Dios no está aquí. Esencialmente estaba diciendo: Fui al espacio. Fui a buscar a Dios, y debido a que no lo veo, entonces Dios no existe. Y por supuesto hay algo realmente tonto sobre eso. Es decir, la idea de que podemos observar Dios con instrumentación humana o con el ojo humano es absurdo, y si hay un Dios, si Dios es real, entonces supongo que Dios sería tan grande y tan por encima de nosotros que no se podría simplemente observar con un telescopio o en un laboratorio. Dios no es un objeto dentro de el mundo. Si acaso, el mundo está dentro de Dios, y no hay perspectiva alguna dentro del mundo de la cual podamos, ver a Dios. Cuando yo estaba pasando por un período de fuertes dudas, cuando estudiaba filosofía en la universidad, Leí un libro. Se llamaba, A Severe Mercy por un hombre llamado Sheldon Vanauken, y era esta historia acerca de cómo llegó a creer en Jesús. Él era un ateo; era un ateo muy comprometido y él comenzó a aprender acerca de Jesús y comenzó a luchar con esta idea de que Jesús podía ser Dios hecho carne. Y cuenta una parábola, la llama La parábola del Acantilado y dice: "Me imaginaba a mí mismo de pie frente a este acantilado y había una enorme brecha delante de mí, y era una brecha entre Dios y yo, y era un vacío que me requiería tener fe en creer que Jesús era Dios hecho carne." Y dijo: "Yo no sentía que tenía la fe para superar esa brecha y llegar al otro lado." Pero esto es lo que dijo: "entonces me di cuenta, me di la vuelta y había una brecha detrás de mí, también." Había una brecha delante de mí, por Dios, y había una brecha detrás de mí se dio cuenta en ese momento que se requería la misma cantidad de fe para creer que Jesús era Dios como para creer que no lo era. Y no es que se requiera fe como: Yo soy un hombre de ciencia, tú eres un hombre de fe. No, todos somos personas de fe. Todos estamos basando nuestras vidas en presuposiciones básicas que no pueden ser probadas. Sí, Dios no puede ser probado, pero tampoco puede ser refutado. Y así que creo que cuando se trata de Jesucristo, creo que al final, lo que me cruza la brecha fue darme cuenta que necesitaba creer que esta persona, este hombre era Dios hecho carne, revelando el Dios inobservable para mí. Pero creo que lo que me hizo sentir mejor acerca de ello, era saber que sí, tomó fe para creer eso, pero tomo la misma fe para creer que no lo era. Y cuando llegué al punto de darme cuenta que de cualquier manera, iba a estar viviendo por fe, eso lo hizo un poco más fácil para mí de cruzar la brecha delante de mí.