¿Acaso la Biblia Aboga por la Esclavitud?

¿Acaso la Biblia Aboga por la Esclavitud?

Si la Biblia es acerca del amor de Dios por la humanidad, ¿cómo es que puede defender la esclavitud?

‘Asegúrate de que tus esclavos y esclavas provengan de las naciones vecinas; allí podrás comprarlos. También podrás comprar esclavos nacidos en tu país, siempre y cuando sean de las familias extranjeras que vivan en medio de ustedes. Ellos serán propiedad de ustedes, y podrán dejárselos a sus hijos como herencia para que les sirvan de por vida.’Levítico 25:44-46a
Enseña a los esclavos a someterse en todo a sus amos, a procurar agradarles y a no ser respondones. No deben robarles sino demostrar que son dignos de toda confianza.Tito 2:9-10a

Seamos honestos—estos versículos de la Biblia realmente podrían molestarnos. Todo el mundo sabe que hay citas que pueden ser tomadas fuera de contexto. Entendiendo los contextos históricos y culturales de las declaraciones aclara su significado. Pero como sea que lo interpretes, estos versículos y muchos otros parecen sugerir que la Biblia acepta la esclavitud—y tal vez incluso apoye su práctica.

Entonces, ¿por qué los cristianos condenan la esclavitud hoy en día? De hecho, muchas personas de fe han dedicado sus vidas a acabar con la esclavitud.1 ¿Acaso esos buenos samaritanos han leído mal la Biblia? ¿Acaso se han hecho de la vista gorda en cuanto a los pasajes que apoyan abiertamente una de las peores formas de opresión humana?

Si es así, tal vez los cristianos deben confesarse acerca del contenido de sus Biblias. Claro, hay algunos clichés agradables, y todo el mundo quisiera creer que hay un Dios bueno y amoroso. Pero este es un tema que es difícil de evitar. Si la Biblia apoya la esclavitud, cualquier cosa que diga, ¿no debería tomarse en serio y como una guía para una vida de rectitud?

Así que vamos a atacar el problema de frente: ¿Acaso la Biblia defiende la esclavitud?

La Esclavitud en el Antiguo Israel

Los dueños de esclavos cristianos en América del Sur respondieron a esta pregunta con un rotundo sí. Por supuesto, sus medios de subsistencia y bienestar económico se habían vuelto tan dependientes de la institución de la esclavitud, que es difícil imaginar que tomarían cualquier otra posición. Sin embargo, los sureños religiosos llegaron con argumentos teológicos complicados para afirmar que la Biblia realmente defiende la esclavitud.2 Y con tantos versículos a su disposición, no es de extrañar que se convencieran de la rectitud de su causa.

Pero puede ser importante empezar por destacar lo diferente que era la esclavitud en el antiguo Israel, de la esclavitud más reciente en el nuevo mundo, basada en la raza.3

Israel era una sociedad pequeña, pastoral-agrícola en la que la palabra hebrea ahora traducida al inglés como "esclavo" se refería más exactamente a un trabajador de servidumbre o doméstico.4 Por supuesto, estos trabajadores vivían en un estado de servicio a causa de la conquista, la etnia o la imposibilidad de pagar una deuda, por lo que su situación es una forma de esclavitud. Sin embargo, pocos israelitas poseían esclavos, y los que lo hacían, poseían pocos.

La práctica era sustancialmente diferente a la esclavitud en gran escala que se practicaba en los antiguos imperios griego y romano; o la trata de esclavos comercializada que luego árabes, europeos y estadounidenses perpetraban en África.5 Como señala el investigador Christopher Wright: "Hay que poner fuera de nuestras mentes imágenes como las de los esclavos de las galeras romanas de Ben Hur, los de los collares de hierro, los barcos de esclavos o los de las plantaciones de azúcar de la esclavitud negra moderna, cuando leemos la palabra ‘esclavo’ en el Antiguo Testamento."6

Esta es una distinción que a menudo se olvida, aunque no es aconsejable imponer a la Biblia tales imágenes de esclavitud.

Orígenes y Leyes de Israel

Los esclavos en Israel tenían más derechos legales, protección y seguridad que otras de sociedades antiguas. Parte de la razón es que la historia de Israel es la de un pueblo redimido—donde ellos mismos habían sido rescatados de la esclavitud en Egipto.

De hecho, los Diez Mandamientos comienzan con estas palabras: "Yo soy el Señor tu Dios. Yo te saqué de Egipto, del país donde eras esclavo."7 Y el recuerdo de su pasado los guio a crear sus leyes: "No opriman al extranjero, pues ya lo han experimentado en carne propia: ustedes mismos fueron extranjeros en Egipto."8

En concreto, las leyes relativas a los esclavos eran únicas en el mundo antiguo. Los esclavos eran incluidos en las ceremonias religiosas, festivales, y prácticas.9  También fueron instruidos para dejar de trabajar en Sabbat (sábado), al igual que las familias a las que servían.10 El sábado era un día de descanso tanto para los esclavos como para los que eran libres.

Además, la ley hebrea protegía esclavos de amos severos; cualquier daño físico causado a un esclavo significaba que debería concederse libertad al mismo.11 Esta es una extraordinaria prestación—las formas modernas de esclavitud nunca ofrecieron esa protección. Se les dio refugio a los esclavos fugitivos; no estaban obligados a regresar con sus dueños originales y podrían buscar asilo en otras ciudades.12 Esto probablemente indica que los esclavos fugitivos no eran un problema generalizado en la sociedad israelita y "da más peso a la opinión de que la esclavitud en Israel comúnmente no era opresivamente cruel."13 Por último se les permitió salir en libertad a los esclavos hebreos después de seis años de servidumbre, y a los expropietarios se les ordenó ofrecerles un regalo generoso cuando se fueron.14

Una Trayectoria Redentora

Las leyes registradas en el Antiguo Testamento revelan que los israelitas practicaban la esclavitud en formas que no eran tan crueles, opresivas e inhumanas como podríamos imaginar basado en la historia más reciente. Los escritos del Nuevo Testamento van un paso más allá.

Jesus mismo predicó un mensaje de liberación: "El Espíritu del Señor está sobre mí. . . Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos. . . a poner en libertad a los oprimidos."15  Sus seguidores abrazaron esta visión, pusieron su fe en él, y se dispusieron a cambiar el mundo. Su mensaje era que Jesús estaba reconciliando sus relaciones alienadas con Dios y la de unos con los otros. El pecado se interpuso entre las personas y Dios; las barreras de raza, clase y género se interpusieron entre las personas.

Pero el apóstol Pablo proclamó que una nueva era en la historia había comenzado: "Todos ustedes son hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús, porque todos los que han sido bautizados en Cristo se han revestido de Cristo. Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús."16

Para Pablo, esto significó que las relaciones existentes entre amos y esclavos deberían ser transformadas. Los esclavos deben servir a sus amos como lo haría Dios, mientras que los amos deben ser buenos, correctos y justos para con sus esclavos, como Dios es con ellos.17

Sin embargo, hay lugares en las cartas de Pablo, que parecen poner en tela de juicio la práctica de la esclavitud por completo. El pasaje más extenso sobre la esclavitud en el Nuevo Testamento es una carta escrita por Pablo a Filemón, un amo cristiano dueño de un esclavo. En la carta, él describe cómo un esclavo fugitivo de Filemón de nombre Onésimo, se había convertido al cristianismo. Pablo envió a Onésimo con Filemón "ya no como esclavo, sino como algo mejor: como a un hermano querido. . .como persona y como hermano en el Señor."18

La implicación era que Filemón debía liberar a Onésimo. Si eso no era claro, Pablo se encargaría de que así fuera en las siguientes instrucciones a Filemón: "De modo que, si me tienes por compañero, recíbelo como a mí mismo. Si te ha perjudicado o te debe algo, cárgalo a mi cuenta. Yo, Pablo, lo escribo de mi puño y letra: te lo pagaré; por no decirte que tú mismo me debes lo que eres. . . Te escribo confiado en tu obediencia, seguro de que harás aún más de lo que te pido.”19

Tolerancia Temporal

Entonces, ¿defiende la Biblia la esclavitud? Las culturas antiguas en tiempos bíblicos ciertamente lo hicieron. Pero las leyes y prácticas del antiguo Israel estaban en contraste con las de Egipto y Mesopotamia. Ellos desafían nuestras concepciones de la esclavitud hebrea y sostienen valores únicos que respetan la dignidad humana y la compasión. La trayectoria esencial de la Biblia indica que la redención y la liberación están almacenadas para la tierra. Esto significa, entre otras cosas, que todas las formas de pecado y opresión—incluyendo la esclavitud—están destinados a desaparecer y ser anuladas.20

La Biblia acepta la esclavitud como parte del mundo secular, parte del panorama de la sociedad humana—debido a que acepta que otros varios pecados son típicos de la cultura. Esto no debe confundirse con abogacía. Lo que algunos llaman defensa es mejor entendido como tolerancia temporal en vista de la próxima liberación (que ya ha comenzado en Jesús).

  1. Dos ejemplos destacados en el ámbito de la esclavitud sexual por sí mismos incluyen la organización Not For Sale, iniciado por el activista cristiano David Batstone (ver http://www.notforsalecampaign.org/) y el movimiento End It, puesto en marcha por el líder cristiano Louie Giglio (ver http://enditmovement.com).
  2. Una muestra de estos argumentos se puede encontrar en Documentary History of Religion in America to 1877, 3ra. ed. (Grand Rapids, MI: Eerdmans, 2003), 534–543, escrita por Edwin S. Gaustad y Mark A. Noll.
  3. La esclavitud se empezó a basar en razas en el año 1500. Antes de eso la raza no tenía nada que ver con la esclavitud.
  4. Christopher J. H. Wright, Old Testament Ethics for the People of God (Downers Grove, IL: IVP Academic, 2004), 333.
  5. En algunas partes del Imperio Romano, 1 de cada 3 personas eran esclavos.
  6. Ibídem.
  7. La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional (NVI) © 1999, Éxodo 20:2.
  8. Ibídem, Éxodo 23:9.
  9. Ver Éxodo 12:43–44 y Deuteronomio 16:11–14.
  10. Ver Éxodo 20:10.
  11. Ver Éxodo 21:20–21, 26–27.
  12. Ver Deuteronomio 23:15–16.
  13. Wright, 336–337.
  14. Ver Deuteronomio 15:12–15.
  15. Ver Lucas 4:16–30.
  16. La Santa Biblia,  Gálatas 3:26–28. Ver tmambién Colosenses 3:11.
  17. Ver Efesios 6:5-9 y Colosenses 3:22—4:1.
  18. La Santa Biblia,  Filemón 16.
  19. La Santa Biblia,  Filemón 17–19, 21.
  20. Para mayor información sobre la comprensión de esta trayectoria redentora en la Biblia, ver Slaves, Women & Homosexuals: Exploring the Hermeneutics of Cultural Analysis (Downers Grove, IL: InterVarsity Press, 2001) de William J. Webb.
  21. Crédito de Foto: Andrea Danti / Shutterstock.com.