Como tres entidades diferentes con una misma esencia, la Trinidad muestra la naturaleza relacional del Dios de la Biblia.
Sabiduría Semanal
Tratar de complacer a Dios a través del esfuerzo humano, es como tratar de cruzar un abismo infinito con nuestros propios pies.
Para que nuestras vidas tengan un verdadero propósito, debemos mirar a una fuente que sea personal y a la vez trascendente.
El mal es el resultado de la voluntad humana, de un corazón tan ensimismado que no permitirá que nada ni nadie se anteponga en su camino.
Dios se revela al hombre a través de sus palabras y se acerca a nosotros a través de sus acciones. Él no nos ha dejado solos.
A medida que aprendemos más sobre las complejidades del mundo, encontramos más evidencia de un creador que aún mantiene y sustenta su creación.
Dios sufre cuando nosotros sufrimos, pero a veces no podemos obtener sabiduría si no nos permite pasar por ello.
“La misma imposibilidad en que me encuentro para probar que Dios no existe, me descubre su existencia.” —Voltaire
La ciencia ofrece muchas respuestas. Pero, debido a que está atada al mundo material, no puede satisfacer todas nuestras preguntas.
Igual que un padre, Dios muestra su cuidado por nosotros a través de la provisión, la formación y la disciplina.
La Biblia instruye a los cristianos a vivir en el mundo sin juzgar a sus prójimos, pero sin permitir que el amor por el mundo los defina.
Entre más llegamos a conocer de Dios, a través de su mundo como de sus palabras, más podamos verlo y disfrutar de él todos los días.