Idea Central: Si tratamos a la Biblia como un todo, todos los detalles relatados en ella se respaldan conjuntamente.
Mensaje para hoy:
La Biblia es por mucho, el libro más leído de la historia. En los últimos cincuenta años solamente, 3.9 billones de nuevas copias han sido vendidas. Sus sesenta y seis libros, muchos autores contribuyentes y la diversidad de género requieren que el lector piense tanto en amplitud como en profundidad.
Tan grande como es, muchos están tentados a sólo echarle un vistazo, sacar las cosas de contexto, o ignorar el arco narrativo que fluye a través de (por lo menos) quince siglos. Pero esta sería una manera desastrosa para leer cualquier literatura—novela, biografía o historia.
El desafío de la lectura de cualquier libro es para llegar al corazón de la intención del autor (o autores), para identificar la historia principal y pasar el resto de los detalles bajo ese marco. Una fuente afirma: "La Biblia es el relato de la acción de Dios en el mundo y su propósito con toda la creación.” Otros afirman que la Biblia es una "narrativa redentora," comunicando la historia de la búsqueda de Dios de su pueblo a lo largo de la historia.
Ambas declaraciones proporcionan un lugar sólido para comenzar la propia exploración de esta bella obra. Si tratamos la Biblia como un todo, todos los detalles relatados en ella se respaldan conjuntamente.
Considera esto:
- ¿Qué otras narrativas redentoras conoces? Compáralas y contrástalas con lo que lees en la Biblia.
- ¿Cómo ha has sido tentado a tratar la lectura de la Biblia, en fragmentos o con ligereza? ¿Qué puedes hacer para reservar tiempo para el estudio serio y la contemplación de esta historia de redención?
Toma acción:
La Biblia tiene muchas historias y personajes interesantes. Lee algunos de estos esta semana. Considera si las cosas con las que luchaban y lo que aprendieron tienen alguna relación con tus propias experiencias. Podrías comenzar desde el principio en el libro del Génesis, o tal vez con la vida de Jesús en el Evangelio de Mateo.