Idea Central: Aunque toda la creación de Dios tiene valor y merece respeto, los seres humanos ocupamos un lugar especial en el mundo porque llevamos la imagen de Dios.

Mensaje para hoy:

Quienes han crecido con mascotas comprenden lo que significa cuando un animal se convierte en parte de la familia. Experimentamos la agradable distracción de un gato durante los momentos estresantes de estudio o trabajo, o la compañía fiel de un perro en medio de las decepciones de la vida. Con el tiempo, empezamos a reconocer distintas personalidades en nuestras mascotas, lo que nos hace preguntar dónde trazamos la línea entre los animales y los seres humanos.

La perspectiva naturalista sostiene que la diferencia entre los animales y los seres humanos es una cuestión de grado, no de clase. Podemos ser más complejos o inteligentes que otros animales, pero nuestro valor intrínseco es el mismo. Algunos incluso han argumentado que un perro adulto tiene más valor que un bebé humano.

En contraste, la perspectiva bíblica es radicalmente diferente. La Biblia enseña que, a diferencia de los animales, los seres humanos llevamos la imagen de Dios. Como reflejo del carácter, la sabiduría y la autoridad de Dios, cada ser humano posee dignidad y valor.

Esto no resta valor al resto de la creación, porque Dios declaró que todo lo que había hecho era "muy bueno". Sin embargo, Dios colocó intencionalmente a la humanidad en el pináculo de su creación, y por eso debemos tratar la vida humana con especial reverencia.

Considera esto:
¿Qué es lo que hace único a los humanos según las Escrituras?
¿Esto disminuye el valor de los otros seres creados? ¿Cómo deberíamos, como humanos, tratar a otros seres vivos?

Toma acción:
Esta semana, esfuérzate por tratar a otros seres humanos de manera que refleje que ellos llevan la imagen de Dios. Habla con respeto, muestra cortesía, y busca maneras pequeñas pero significativas de demostrar el valor que cada persona posee (tratándolos como te gustaría ser tratado a ti mismo). Como portadores de la imagen de Dios, esfuérzate también por cuidar el mundo creado a tu alrededor, de la misma manera que Dios cuidaría de su creación.

¿QUIERES CONOCER A DIOS PERSONALMENTE?

Dios nos ama y tiene planes increíbles para nuestras vidas, pero ¿cómo llegamos allí?
Los siguientes pasos trazan un camino claro que Dios preparó para que encontremos una relación con Él.