Día 33: Tu Felicidad y Tu Tesoro
Idea Central: “La principal causa de la infelicidad es querer cambiar lo que quieres más por lo que quieres ahora.” —Zig Ziglar
Versículo: “No acumulen para sí tesoros en la tierra, donde la polilla y el óxido destruyen, y donde los ladrones se meten a robar. Más bien, acumulen para sí tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el óxido carcomen, ni los ladrones se meten a robar. Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.” —Mateo 6:19–21
Mensaje para hoy:
Agarrar la fruta madura con éxito no es siempre el logro más grande. Es sin duda el más fácil, pero hay mucha más fruta en los lugares que requieren un poco más de trabajo para llegar a ellos. El largo plazo es mucho más difícil y aburrido, y requiere más paciencia, fuerza y resistencia que el sprint. El sprint se trata de velocidad, llegando a una gratificación inmediata.
Cada vez con mayor frecuencia, somos personas construidas para correr. Las inversiones de alto riesgo son más atractivas que invertir en acciones de empresas prestigiosas y solventes (blue chip). Lees la cintilla de noticias en la parte inferior de la pantalla del televisor, pero no te convierte en una fuente de información. Vemos por encima y resumimos la información, perdiéndonos en los detalles de la vida cotidiana.
Las cosas eternas se encuentran en el camino menos transitado. Tu tesoro es mucho mayor con Dios que sin él. Afortunadamente, él quiere estar en tu viaje. Su amor es tan grande para ti que no sólo está a tu lado en la maratón; también está en los sprints. ¡Es una cosa hermosa!
Considera esto:
- ¿Es posible conocer las cosas eternas en nuestra existencia terrenal?
- Si “no puedes llevarlo contigo,” ¿qué crees que es el tesoro en el otro lado de la vida?
Toma acción: Haz una lista de todo lo que posees. Todo. Incluye tu colección de gorras, todos los lápices labiales sin terminar y todo lo que está en ese cajón en la cocina que nadie quiere abrir. Ahora asigna a quién debe darse cada elemento cuando mueras — o antes.