¿Qué es la Cuaresma?

¿Qué es la Cuaresma?

¿Por qué los cristianos hacen sacrificios durante 40 días? Conoce y comprende la Cuaresma.

Me atraso un poco en la Cuaresma, pero también me sucede en Navidad.Fitzgibbon, “Going My Way”1

¿Cuántos de nosotros podemos identificarnos con este sentimiento?

Atravesamos un tiempo en la vida cuando tomamos algo en serio, tal vez una dieta. Renunciamos a los dulces, carbohidratos, almidones, carne y a todo lo que la nueva dieta loca demanda. Después, hacemos ejercicio: correr y tal vez incluso levantar pesas. Durante un mes o dos, perdemos unos cuantos kilos, perdemos un par de centímetros y nos sentimos muy bien por lo que estamos logrando.

Luego, vienen los días de fiesta o el estrés del trabajo, la escuela o las responsabilidades familiares y, con ellos, el fin de toda restricción. Todo lo que habíamos perdido (o ganado, dependiendo de cómo se mire) se gana (o se pierde) nuevamente.

Sucede todo el tiempo. Sin embargo, este patrón de ayunar y luego festejar no trata sólo acerca de la comida. Toda la vida se vive en temporadas similares. 

Algunas estaciones se caracterizan por la abundancia, crecimiento, alegría, celebración o indulgencia: casarse, tener hijos, conseguir grandes logros, Navidad, Acción de Gracias. Otros tiempos son todo lo contrario: se pierde el trabajo, se pierde la perspectiva, o se pierde a un ser querido. Estos días están llenos de tristeza, vacío, búsqueda o una sensación de hambre espiritual.

Este patrón que va y viene es el ritmo de nuestras vidas, uno que da una idea clave sobre el tiempo llamado Cuaresma.

Un Tiempo de Preparación

La Cuaresma es un período de cuarenta días que los cristianos observan cada año justo antes de Pascua, por lo general desde finales de febrero hasta principios de abril. La Cuaresma comienza en un día conocido como Miércoles de Ceniza (aproximadamente seis semanas antes de Pascua) y continúa hasta el domingo de Pascua, sin contar los domingos, ya que estos días todavía se consideran días de celebración.

La palabra “cuaresma” viene de una palabra sajona que significaba “longitud”. Originalmente, se refería a la estación de primavera en el hemisferio norte, cuando los días se alargaban y aparecían los signos de nueva vida.2

La Cuaresma estaba destinada a ser un momento de reflexión y arrepentimiento antes de las celebraciones de la Semana Santa. Durante siglos, los cristianos han conmemorado la crucifixión de Jesús el Viernes Santo y su posterior resurrección de entre los muertos el domingo de Pascua.

Los cristianos creen que la muerte de Jesús en la cruz proporciona el perdón de los pecados de todo aquel que lo solicite. Y que la victoria de Jesús sobre la muerte da a cualquier persona que crea en él una esperanza gozosa de una nueva vida y una relación restaurada con Dios.

Así, los primeros cristianos desarrollaron la temporada de Cuaresma como un tiempo de preparación con el fin de experimentar cada año el significado completo del Viernes Santo y el Domingo de Pascua. Así como la gente se prepara cuidadosamente para los grandes eventos en su vida personal, una boda, el nacimiento de un niño o una graduación, la Cuaresma invita a las personas de fe para que preparen sus corazones y estén listos para recordar la muerte de Jesús, conmemorar su sacrificio y celebrar su resurrección.3

Una Jornada por el Desierto

La idea de la Cuaresma se inició durante los siglos III y IV.4 El número de días se basa en el significado bíblico del número cuarenta y, específicamente, los cuarenta años que los israelitas vagaron por el desierto y los cuarenta días de ayuno de Jesús en el desierto.5

Por lo tanto, los cristianos describen los cuarenta días de la Cuaresma como un viaje en el desierto. La Cuaresma representa un tiempo de búsqueda de Dios en medio de la ruptura de la vida, una temporada de ayuno intencional antes de un tiempo de fiesta. Históricamente, los cristianos han renunciado a algo durante la Cuaresma como una forma simbólica de conmemorar su viaje y centrar su energía en la relación con Dios.

Más a menudo, esto incluye el ayuno de ciertos alimentos o bebidas. Algunos se saltan una comida al día o renuncian a cosas específicas, tales como la carne, la cafeína, el alcohol o los dulces. Otros dejan lujos más modernos, como el Internet, redes sociales o correo electrónico; leer libros, revistas o periódicos; hacer compras; ver televisión o escuchar música.

Es importante recordar que ninguna de estas cosas es inherentemente mala, pecaminosa o mala. Sin embargo, cualquiera de estos placeres puede fácilmente convertirse en algo demasiado importante para nuestras vidas. Probablemente, todos hemos vivido esto.

La idea de un ayuno cuaresmal es abstenerse de estas influencias sutiles pero poderosas en nuestras vidas, con el fin de llegar a estar menos distraídos y mejor equipados para dar una atención completa al camino espiritual. Es una ocasión de renunciar a algo que normalmente se disfruta para identificarse con Jesús y el sacrificio que hizo el Viernes Santo.

Cabe destacar que “la Cuaresma no debe ser malhumorada, es una prueba anual durante la que, a regañadientes, renunciamos a un puñado de placeres”.6 La Cuaresma debe considerarse como una oportunidad para reorientarnos con Dios y buscar una nueva relación con él.

También, muchos cristianos adoptan algo nuevo durante la Cuaresma. Eligen orar diariamente en horas determinadas, leer la Biblia, servir a los pobres, tener momentos de silencio y meditación o participar en hábitos que enriquecen el alma.7

En el Miércoles de Ceniza, algunos cristianos asisten a servicios religiosos especiales y se colocan ceniza en la frente como un símbolo exterior del arrepentimiento y el ayuno que están llevando a cabo. El día antes del Miércoles de Ceniza se ha hecho conocido como Martes de Carnaval, Fat Tuesday o más familiarmente como Mardi Gras. El día se considera la última oportunidad para disfrutar de los alimentos ricos, bebidas embriagantes o cualquier otra cosa que se dejará durante las siguientes seis semanas.

Un Ritual Extraño

Este ritual anual puede sonar extraño para alguien que nunca haya observado la Cuaresma. Pero el punto de la Cuaresma no es hacer algo “religioso” para de alguna manera impresionar a Dios. Tampoco se trata de llamar la atención sobre lo se que se está haciendo. Jesús mismo advirtió a sus seguidores sobre no hacer el ayuno ni la oración de una manera pública y orgullosa.8

Más bien, la Cuaresma trata de reconocer las temporadas regulares de la vida y abrazar el ritmo del ayuno antes de los festejos. Y este ayuno, si uno decide observarlo, es un camino de fe. Una jornada de reflexión y auto examen. Un viaje que provoca arrepentimiento y transformación.

La Cuaresma es una jornada que culmina con la esperanza de la mañana de Pascua.

  1. Así lo dice el personaje Fitzgibbon en el guión de Frank Butler y Frank Cavett’s, “Going My Way” en Best Film Plays of 19431944, ed. John Gassner and Dudley Nichols (New York: Crown Publishers, 1945), 187.
  2. Bobby Ross, Living the Christian Year: Time to Inhabit the Story of God (Downers Grove, IL: InterVarsity Press, 2009), 129.
  3. Emily Brink y John. D. Witvliet, ed., The Worship Sourcebook, (Grand Rapids, MI: Baker Books, 2004), 551–552.
  4. Para más antecedentes históricos sobre la Cuaresma y cómo se integra en el calendario litúrgico de la Iglesia Cristiana, véase Joan Chittister, The Liturgical Year: The Spiraling Adventure of the Spiritual Life (Nashville, TN: Thomas Nelson, 2009).
  5. La Sagrada Biblia, Deuteronomio 29:1–6 y Mateo 4:1–11.
  6. Bread and Wine: Readings for Lent and Easter (Maryknoll, NY: Orbis Books, 2003), xvi.
  7. Para diversas lecturas y meditaciones de Cuaresma, véase Bread and Wine or Henri J. M. Nouwen, Show Me the Way: Daily Lenten Readings (New York: Crossroad, 1992
  8. Véase La Sagrada Biblia, Lucas 18:9–14.
  9. Crédito de Foto: pinkypills / Shutterstock.com.